Ciencia
Excelencia académica

ALICIA DICKENSTEIN, UNA DE LAS CIENTÍFICAS ARGENTINAS MÁS RECONOCIDAS

viernes 7 de marzo de 2025

La profesora e investigadora de la UBA, Alicia Dickenstein, cuenta cómo fue su carrera dedicada a la ciencia y a la formación de científicos. Carrera que le ha valido recibir gran cantidad de premios, incluido el Premio Konex de Platino, en 2023, y el L’Oréal-UNESCO “Por las Mujeres en la Ciencia” en 2021. 

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Alicia Dickenstein, matemática de la UBA.

Este año 2025 el Día Internacional de la Mujer lleva el lema: “Para TODAS las mujeres y niñas: Derechos. Igualdad. Empoderamiento”. Un ejemplo de esto último es la reconocida científica argentina Alicia Dickenstein, Profesora Emérita de la Universidad de Buenos Aires e Investigadora Superior (J) del CONICET. 

Dickenstein es una de las científicas argentinas más reconocidas tanto a nivel nacional, como internacional. Su excelente carrera también fue reconocida con el Premio Konex de Platino, en 2023; y el L’Oréal-UNESCO “Por las Mujeres en la Ciencia” en 2021, y a fines de 2024 recibió el Premio Perfil en la categoría Mejor aporte en Ciencia y Tecnología. 

“Los premios como los que he recibido son muy importantes pero, no sólo para mí, es importante que en este momento se esté dando un premio a la ciencia. Momento en que la ciencia está tan devaluada socialmente, que hay una campaña de desprestigio totalmente inmerecida. Espero que la sociedad argentina comprenda que sin investigación en ciencia y tecnología no hay progreso, que el país no puede desarrollarse”, opinó la matemática.

A los 27 Dickenstein se doctoró en Ciencias Matemáticas por la UBA. A la par de su carrera científica, comenzó la carrera docente en la Universidad en 1975. En 1996 se convirtió en la primera directora del Departamento de Matemática de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales. También fue la primera mujer en ser elegida para presidir la Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de Argentina, en sus 150 años de existencia.

“La matemática es una pasión permanente en mi vida. Es una ciencia que sirve de base para todas las otras ciencias. A veces no se aprecia lo suficiente, sobre todo ahora. Yo elegí estudiarla porque me lo recomendaron en un test vocacional del Colegio Nacional Buenos Aires, pero en cuanto entré me di cuenta de que era mi lugar”, contó la matemática Alicia Dickenstein. 

¿Cómo ves el lugar de la mujer en las ciencias?

En mi caso particular tuve suerte, nunca me hicieron sentir que intelectualmente las mujeres pudiésemos dar menos que los hombres. Tanto por la educación que tuve en mi casa, como por la educación que tuve en Nacional Buenos Aires.

No pasé por esa experiencia en que a veces los padres, con la mejor de las intenciones, desalientan a las chicas, creyendo que la ciencia no es una carrera para mujeres. 

Tuve la suerte de que durante la tesis doctoral, por ejemplo, éramos dos mujeres en mi grupo, y trabajamos juntas durante todo ese trayecto de nuestras carreras. No me dí cuenta de lo importante que fue eso para mí hasta mucho más tarde. 

El hecho de compartir la carrera doctoral con una amiga mujer fue de mucha ayuda, en una época en que para las mujeres era mucho más difícil que en la actualidad. No sólo en actividades diarias es importante tener alguien que te acompañe y apoye, sino que en ciencia, y más en matemática donde las ideas se potencian, cuando se piensan entre varios. Es mucho más que sumar las partes. 

Yo creo que en este momento hay un quiebre muy grande, las mujeres están mucho más empoderadas. Ya no hay cosas que las mujeres no podamos hacer, sin embargo sigue habiendo cosas intangibles que están en la base de la sociedad.

Por ejemplo, un hombre que toma decisiones está bien visto, una mujer que toma decisiones, no se la ve tan bien. Se suele poner más en duda, o cuestionar, las decisiones de una mujer en posición de liderazgo, que las de un hombre.

¿Cómo ves la situación de la ciencia en el país actualmente?

Es un momento dramático porque se está destruyendo algo que llevó muchos años construir. Por ahorrar dinero se están destruyendo años de inversión en la formación de muchos y muy buenos científicos y científicas. Tenemos gente muy destacada a nivel mundial, y se están yendo. Están emigrando a otros países donde se los valora más, y se les paga mejor.

Para mí hay una falta de visión de futuro del país. No sólo es gente formada y buena la que se va, sino que estamos perdiendo la posibilidad de que los jóvenes se formen. Yo viví muchas épocas difíciles en el país, y tengo en claro que lleva muchos años, mucho esfuerzo, y muchos recursos, poder reconstruir el sistema científico que hoy se está destruyendo.

¿Por qué te parece importante la matemática? 

El pensamiento matemático es fundamental para estar alerta, ayuda al pensamiento crítico, al poder de decisión y de raciocinio. Sirve para cualquier decisión que queramos tomar en nuestras vidas, sobre todo ahora con las tan extendidas noticias falsas o fake news. 

La matemática tiene muchas aplicaciones. No es sólo hacer cuentas, sino que se dedica a entender las relaciones entre los objetos, razón por la que es la base de casi todas las otras ciencias. También es la base de toda la tecnología. La computación, los programas que se usan en un teléfono, en todos ellos la matemática es omnipresente. 

¿Cuál te parece que es el rol de la matemática en la sociedad?

La matemática básica está grabada en nuestro cerebro humano. Es una habilidad con la que nacemos. Del mismo modo en que todo podemos correr, jugar a la pelota, y eso no nos hace deportistas de élite, nos permite divertirnos haciendo eso. Lo mismo sucede con la matemática, yo creo que todo el mundo puede disfrutarla. 

Tiene la capacidad de enseñarte cosas útiles. Te enseña a hacer cuentas, a predecir un resultado. Aún cuando reposemos en las máquinas, como una calculadora o una computadora, es importante tener un sentido crítico, para poder predecir, y saber si la máquina está dando un resultado raro. Eso sirve para cada aspecto de nuestras vidas.

Un ejemplo clave son las estadísticas. Los datos estadísticos pueden llegar sesgados, y darnos una idea errónea sobre algún tema. Tener un entrenamiento matemático te ayuda a detectar esos sesgos que a veces buscan llevar a la opinión pública hacia el lado contrario al que los datos apuntan realmente. 

¿Cómo sentís que influyó la educación pública en tu vida y en tu educación y qué significa la UBA para vos? 

Fue básica en mi vida, tuve el honor y el placer de ir al Nacional Buenos Aires, donde no solo aprendí matemática, sino que aprendí cosas de cultura general que son básicas en quién soy. 

Esa formación amplia para mí es fundamental, yo creo que cualquier disciplina a la que uno se dedique tiene que tener un conocimiento más grande del mundo, y hay que conocer los horrores del pasado para intentar no repetirlo.

La UBA, esta facultad, ha sido mi hogar, mi casa. En las carreras que se dan acá en Exactas, hay mucha ciencia básica, experimental y aplicada. Todas necesitan de un largo proceso que yo creo que solo puede ser financiado por el Estado o las universidades públicas.